Es hermoso recordar los tiempos idos.

No por nostalgia, ni por depresión, ni porque se extrañen....

Es hermoso recordar para poder estar agradecida con la vida, pero por sobre todo con Dios...por permitirme haber vivido toda y cada una de las instancias que tuve que atravesar.

Las imágenes que me sorprendieron esta tarde, fueron las de una época de mi juventud.

Tiempos en los que siempre tenía a mi lado " a alguien " para compartir todo lo que me sucedía en lo más íntimo de mi alma.

Tiempos a los que yo defino como "en los que nadie había muerto".

Hermosos años, en los que todo era posible, en los que simplemente soñando... se podía ser feliz.

En los que con la punta del pie se comenzaba a transitar la vida de adulto y se estrenaban nuevas vivencias.

Extraño tal vez esa compañía.

Pero ... disfruto mucho la distancia que tengo desde mi mirador solitario y en paz.

Sí! Disfruto este tiempo de recoger lo sembrado!

Tiempo también de sorpresas!

Unas gratísimas y otras de "ni imaginé que fuese así"... pero todas aceptadas! Todas merecidas!

Nuevas etapas han llegado y he superado todas... Ahora cuando recuerdo sonrío con felicidad....

Fue un bello tiempo, gracias Dios!

A prepararlo todo para la llegada de la Navidad!

En especial no perdamos de vista nuestra alma y nuestro corazón: a limpiarlos de cosas viejas que estorban y dejar espacio libre para todo lo hermoso que nos está llegando!

A prepararse entonces! Y que todo lo puedan hacer con felicidad sintiendo el sonar de la música más bella en el interior de vuestro ser...