Sinembargo, sinembargo....

Sinembargo, sinembargo... en la cabeza de la niña seguía girando y girando la imagen de la portentosa "!Singer"...

"Cómo gira la rueda mayor! Cómo gira la rueda menor! Cómo se engancha y se desengancha la correa! Qué hermoso cromado! Y las llavecitas, cromadas también, clik clik clik...suben y bajan...aprietan y sueltan."
-"Cómo me gusta la Singer.!!! Claro, alcaro que después de la Maseratti de los muchachos de Turismo Carretera.- decía a todo suspiro la niña."

Y se la pasaba rondando alrededor de la máquina todo el santo día.
Jugaba a las muñecas...en el umbral de la habitación donde estaba la máquina.
Si la máquina estaba en el hall...pues por allí estaba la niña.
Si estaba en la cocina....La negrita se instalaba en la puertita de color verde esperanza. Con muñeca o con libritos....ella siempre rondando la máquina..."La Singer"...la de Perón....la que usaba la madre para ganar dinero y ayudar en los gastos...para dar alguno que otro de los gustos que sus hijas le pedían....Pero por sobre todas las cosas:

"Con esta máquina les costearé los estudios!" decía la madre...y así fué con el tiempo, así fue nomás che!!!!. Visionaria la mamá Eloísa.!!!

Pero volviendo a las estratagemas de la niña y la famosa Singer....
Un día se le dió y se fue con el vestidito de la muñeca a "coser un poquito." - según su más interna intensión.(declarable al menos).

Veremosss...veremos... se hace así...clik... y luego así...clok no! la puchadigo...Así no va!
A verr... lo pongo aquí y luego así... clokcluk ono! la puchadigo...aquenó!
Averquesí...sii?.....
A verrr? Y esto?? Qué lindo??? Dientecitosss!!!
Adelante... Atrás... Adelante y para atrás....adelanteyparatrassshayyyyyyy

La boca de la negrita se abrió como un gran túnel silencioso... comenzó un hayyyy y quedó estática.

Se asomó la mayor, que se estaba armando sus bucles... y gritó:

-"Mamá!!! Veniiii a verrr lo que le pasó a mi hermanaaaa!!! Lo que hizo!"

La madre no podía creer lo que pasaba en su Singer y con su hija menor!
La niña había puesto el dedo sobre los dientes que llevan y acomodan la tela y había bajado la aguja y SE HABIA COSIDO EL DEDO!!!

L i t e r a l m e n t e....cosido el dedo. La aguja entraba por un lado y salía por el otro.

Elías, ayudaaa, socorroooooo! Gritaba desesperada Eloísa...que ya no sabía que hacer....

Entonces: desarmar parte de la máquina, se rompío la aguja!!torniquete en el dedo! que no se le escape Elías! tome con esta pinza Luis! sujétela bien señora!...y como siempre la negrita cabeza abajo.....

Asepsia?Ninguna!. Salvo la grasa de primera calidad que portaban los instrumentos y las manos que tiraban, apretaban y retorcían...

Después el ritual de campo: Hay que quemar la aguja para que no le duela... gritó uno y como no había otra cosa que hacer...pues a quemar la aguja.

Negrita pensaba: Qué tiene que ver la aguja quemada con mi dedo que me duele?
Pero fué tan grande la que se armó que su mamá no le pegó y por primera vez en años, la tuvo a upa mucho tiempo y hasta la acunó un poquito.

Mi mamá me ama!!! Que´dulce lugar es este ! suspiró la niña...