Amanzando la vida!!!

La vida no ha sido nunca entendida, comprendida o saboreada de primera mano por mi.

Hace más de 60 años que me dedico a colocar mis manos con los dedos entreabiertos para que pase como el viento o agua del mar entre ellos y así poder agradecerle aunque sea esa caricia.

Y cuando el aire o el agua tocaban mi cabeza , le daba gracias al Dios Supremo porque me parecía que era El el que había tomado la iniciativa.

Dicen los que saben que el Gaucho o Indio Pampa, amanzaba a sus caballos con caricias y roces para quitarle las cosquillas. Y le hablaba suavecito junto a su oreja para que reconociera su voz y luego le sirviera para tener confianza y para que obedeciera lo que el le pedía, según las circunstancias.

Y creo que ese estilo de doma fue la que intenté hacerle a la vida.
La quise amanzar para que no me corcoveara y le hacía morisquetas y chistes para resultarle simpática... pero aunque no pasó de corcoveo, muchas veces me llevó a tierra, pero siempre tenía la premisa del domador, levantarse enseguida y con gracia, para poder recibir el aplauso del que mira.

Muchas veces junto a ella me levantaba coceando al aire, yendo hacia el cielo, como retando a la vida, cargada de orgullo por fuera, pero sujetando temores por dentro.

Pero aprendí , ya grande!, que si me quedo quieta con la mano tendida, ella solita como gato mimoso se acaricia sola.
Y en otras, aprendí que es al "cuete" hacerle frente cuando viene con enojos, es mejor montarse en ella y esperar que sus emociones se aquieten.

Así aprendí a "vistear" , haciéndole como que le peleaba, viendo quién era más rápida para el disimulo y distracción. Y me le escapaba cuando era muy "fiero" lo que me presentaba o intuía que traía "bajo el poncho".

Y así aprendí a sentirme valiente, a sentirme capaz, a sentir que podía en esta vida salir cumplida. Si no ganadora por lo menos que pude cumplir y "empatada".

Aprendí el disimulo. De pequeña decía "no me dolió" y caminaba derechita hasta oculta, poder llorar y lamerme las heridas como perro solitario.

Aprendí la negación .!!! Si alguien querido moría... Yo decía:"Se fue de viaje! "
Y en los velatorios no miraba al muerto, me lo imaginaba vivo y cuando se retiraba el cajón daba un: " Hasta luego! " ... Y listo...!!!

Así logré que nadie muera como la gente les llora. Siempre que se me pianta una lágrima es porque les extraño y sé que tendré que ir yo a visitarlos, que ellos no pueden venir a tocar el timbre.

Otras veces, cuando la ausencia duele... saco el amor de mi corazón y por un ratito al menos le doy forma y calor .... muy cerquita de mi y me consuelo.

Así .. Siempre... pero en el amor... como todas mis vivencias, las más importantes, las más impactantes, las busco y las detecto en los extremos de mi vida:

* De muy niña, cuando solamente era " la negrita" con minúscula
* En la plenitud y con dos hijos, cuando alguien suspiró en el momento justo a mi oído y me amanzó como el indio pampa a su potranca.

De niña, ya les conté cuando sentí el amor a los poquititos años no superado los 5 . Chiquita y con semejante sentimiento? Si! ... yo lo recuerdo!

En la plenitud, divorciada y con dos hijos... alguien me dijo:"Al fin" y suspiró junto a mi oído, y así como María aquietó el dolor de mi hermana perdida, éste sacó lejos de mi el resentimiento y la bronca con soledad, en la que me había sumido, el que mal me amó y me traicionó.

Ese émulo del indio pampa, no solamente suspiró ,sino que supo decir:" Yo estaré a tu lado , como amigo y como novio, pero no te haré mía hasta que lo pidas por favor... allí hablaremos....." . Y cumplió, jaja, sí que cumplió!

Cuánta inteligencia y sensibilidad!!!
El sabía y mucho, que con la suavidad y la dulzura se conquista para siempre a una mujer que corcovea y corcovea, porque no cree más ... pero quiere creer....

Y así fue, que fuimos felices, el tramo más feliz de mi vida. Inteligente, buen mozo, paciente, generoso... y me amó y lo amé ... y nos seguimos amando!

Duró lo que nos permitió la vida.

Le dije : Hasta luego! a los cinco años apenas .... fue difícil hacerse la distraída o vistearle a la vida.... se acercó feíta esa vez ... pero no miré, lo negué y aún cuando la ausencia se va estirando hasta hacerse sentir en los huesos... busco el amor que tengo, dentro mío.
Ese amor caliente, perpetuo, y le saco un poco a pasear por mi entorno , y le pongo su rostro y el sonido de su voz. Y a veces trato de revivir algún tramo de diálogo mantenido hace ya tiempo, allá lejos, pero recordado con frescura...... y me consuela... y vuelve a su lugar en donde vive: mi corazón y mi mente.

Vida esquiva, vida hermosa, vida loca, vida tierna, vida generosa, vida caminada y aprendida.... y falta aún yo no se cuánto.

........ y me amaron y amé .... y eso no es poco ....


-