El tiempo pasa...

Negrita a fuerza de calcio, y de tanto movimiento, estaba tomando una "apariencia saludable..."




No era que derrochara salud, pero entre algunas de las posiciones logradas, gracias a su" apariencia saludable", era la de poder salir con Martita más allá de la cuadra en que vivían.




Con el tiempo también la dejaron llegar hasta la plaza y de allí a la calesita... sólo un paso, unas monedas y a divertirse!!!









La calesita ,para negrita,era el sumun en ese tiempo .



Primero, durante la siesta preparaba su ropa, los zapatos bien blanquitos y después a vestir y peinar a Martita, su pequeña muñeca.... rubia, dorada por el sol marplatense, con sus ojos de miel y su nariz pequeña y respingada....(trataré de colocar foto, si la encuentro).




Y allí iban las dos, contentas, con unas pocas monedas, pero confiadas en la bondad del calesitero (que seguro les iba a dejar sacar la sortija y más de una vez....) - Si!!! El es muy bueno!!! dijeron las dos entre risas.

Cuando estaban a dos cuadras, ya podían escuchar la música moderna que pasaban en la calesita.

- "Escuchá Martita"... el Baión del Desierto" es lo más nuevo que hay".

- "Escuchá: paraparaparapapá paraparaparapapá paraparapapapá... si!!! está buenísimo!!! daleee caminá un poquitito más rápido....!" - entusiasmaba la niña a su pequeña acompañante.

Y negrita iba con su muñequita rubia, "Martita",como toda compañía. Se entendían tan bien, que todo lo que Martita no quería hacer, pues negrita lo lograba.... como ser: peinarse....

Negrita podía estar horas contándole cuentos , entreteniéndola , mientras desenredaba su cabello rubio y enrulado.

- Después de probar varios peinados,decidió lo de siempre... levantárselo con una cinta y hacerle en el flequillo un sinfin de pequeños rulitos...y diciendo un "ya está"... dar así por terminada su obra maestra.

- "Mirá que bonita que estás" - le decía levantándola y ayudándole para
que se viera en el espejo del Botiquín del baño.

Así era como formaban una muy buena dupla. Y negrita como siempre jugando a la mamá...

Era muy normal que antes de ir a la "cale", fuesen a la plaza a juntarse con el resto de sus amigos.
Si !realmente la pasaban muy bien!

Esa tarde justamente cuando por alguna razón pasaron más de una vez el baión del Desierto... Sacaron varias veces la sortija y Martita estaba más linda y feliz que nunca, con su solerito de piké rojo y su piel conservando aún el dorado de sus vacaciones.

Pero, (siempre hay un pero en las historias de negrita, no se pueden
evitar)... mientras Martita disfrutaba sus últimas vueltas, Negrita estaba cuidándola sentada en la banca, frente a la puerta.. cuando...

En una de esas, en medio del ritmo del baión apareció el chico que le había dicho el otoño pasado :"querés andar conmigo?", en el intermedio de las películas que pasaban en el Cine Gran Atlántico.

Negrita lo miró "bien mirado", y se dijo - "Es lindo el chico, lindos ojos claros, lindo pelo rubio, linda ropa, lindos zapatos blancos (aunque tienen pinta de ser los de la primera comunión...) y... debe tener 7 años ó no más de 8... Bah!!! y a mi que me importa"!...concluyó en su pensamiento.
Prestando atención a sus pensamientos, uno podría decir que habia madurado muchísimo en menos de 8 meses nuestro personaje, pe..ro.

En esa observación estaba, cuando alguien le gritó al niño :"Dale ..Piquillín, bailalo un poco al Baión"... y Piquillín comenzó a bailar unos pasos y negrita sintió un flash!, se puso nerviosa porque entre paso y paso el rubiecito la miraba....




- En una de las miradas que le metió el pibe, le guiñó el ojo y parando su baile embocó para su lado..




- Negrita se dijo - "otra vez nooo!!!" y salió disparada por el otro lado de la calesita .

- Cuando pudo trasponer la puerta enfiló para la derecha y de allí hacia Alvarez Thomas , lo único que quería era llegar a su casa sin que nadie le viera la cara,que seguro la tenía bien colorada por lo caliente que la sentía....

- Corrió como cuatro cuadras sin parar, casi sin poder respirar... hasta que paró en seco y comenzó a gritarse de esta manera...

- "No ! No puede ser!!! Qué hice Dios mío!!!Noooo Martittaa!!!

- Y volvió sobre sus pasos, ya no corriendo... Volando!!!

- Tan desesperada estaba que cuando faltaba media cuadra para llegar a la calesita, vio que venía Martita llorando y acompañada por alguien que la traía de la mano, tratando de calmarla...pero no se fijó de quién se trataba .
- "Martitaahahah!!! axclamaba una y otra vez , la negrita, mientras abrazaba a su pequeña amiga, que estaba toda sucia y raspada desde la frente hasta sus zapatitos blancos.... y llorando como loca.

- "No le pasó nada, se asustó y cuando te fuiste corriendo se largó de la calesita en marcha y se cayó... perdoname pero: qué te pasó que saliste
disparando de esa manera y te olvidaste de esta chiquita???" - El que así preguntaba era Piquillín que la miraba con ojos sonrientes...

- "Me di cuenta de que era tarde, y me asusté y me olvidé de Martita, y no tengo perdón, y me van a matarrrr" - y seguía llorando sin consuelo.

- "Pero no es nada! Si no pasó nada! y no es tan tarde todavía hay Sol"

- le dijo Piquillín... consolándola.


- Negrita le miró con su cara descompuesta en llanto y le dijo "gracias!." y la voz de negrita sonó llena de gratitud y de dulzura. Tan suave que tenía una entonación sensual, aunque ella no se daba cuenta ni sabía que era eso. Pero evidentemente ese tono le llegó al corazón del pibe que se sonrojó y le dijo:

- "Vení. vení conmigo, vamos a la plaza y te ayudo a limpiarla y esperamos un poquito a que se te componga la cara.... Vamos, vení.."

- Y negrita dijo:" Si!" y sintió un calorcito agradable en su corazón.


Con Martita entre ellos y llevándola de la mano , se fueron los tres rumbo a la plaza.

Después que limpiaron a la pequeña, se sentaron un rato y negrita con menos vergüenza, se atrevió a preguntarle.

- "Te acordás, en el cine, cuando me preguntaste algo???"


- " Si! Te pregunté si querías "andar" conmigo. " - contestó Piquillín.

- Entonces negrita tomó impulso y le dijo: "sabés...? yo... no sabía qué me querías decir con eso... y entonces no te contesté como quería.

- "Ajá!!! Yo me di cuenta - siguió el pibe - pero no te preocupes, no tenés que tener vergüenza ni escaparte de mi. Yo no quise decirte nada malo"...- Y mientras así decía, Piquillín se paró, colocó sus pulgares enganchados en las presillas delanteras de su pantalón, y comenzó a patear las piedritas rojas del camino de la plaza... El sól que ya caía oblicuo sobre el sendero, iluminó su rodilla y la niña pudo ver como brillaban como oro el vello rubio que la cubría. ...

- "Y qué querías pedirme con eso de "andar"... ehhh???"- seguía interrogándolo la negrita, que a estas alturas se sentía a sus anchas, igual que cuando estaba en la silla petisita hablando con Bernardo, su zapatero amigo.

- "Es como ser novios, pero no es ser novios... es ser como amigos especiales.... como ser.... :
* saber que si uno va a la calesita el otro va y están juntos,
* que si vamos al cine podemos sentarnos en la misma fila,
* que podemos charlar en la plaza,
* que otro chico no te moleste porque saben que te cuido y que le rompo la cara si te hacen algo malo... Eso te quise decir...

- "Aja!" qué bien... Eso es bueno... Es muy lindo... Es muy bueno!!!
dijo negrita, como pensando en voz alta.

- Piquillín la miró y sonrió... y le dijo ... te parece bueno??? te gustaría???

- Por supuesto que me gustaría ser tu amiga especial... Claro que sí!!

- Es que... sabés Piquillín???- siguió la niña- Vos sos especial, sos muy especial y me gustás muchísimo y me hace muy feliz ser tu amiga especial....
Y le dió un sonoro beso en la mejilla.... Jajaja!!! Y se sintieron felices los dos....

De allí en más, eran más divertidas sus salidas al cine, a la plaza y a la calesita....Cualquiera de los dos que llegaba a uno de esos sitios, buscaba prontamente con su mirada al otro, y cuando se veían sonreían.(Ya no estaba sola, alguien la cuidaba!)
Y no se puso nunca más nerviosa porque ese chico le guiñara el ojo...


Mejor dicho no se puso nerviosa nunca más cuando cualquier chico se acercaba, le guiñara el ojo, o le propusiera...."querés andar conmigo?"

Si pasaba algo así... ella lo solucionaba con una carcajada y terminaba siendo amiga del fulano.

- Qué fácil es vivir!!! Se decía en esa época la niña... y su risa sonaba fresca, feliz, confiada!!!
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Porque ahora tenía un gran amigo, su primer amigo varón... y era el primero de un sinfín de grandes amigos varones que iba a tener en su vida...

Cuando en la adolescencia llegó a contar más de 17 amigos varones... jajaja ....eso significaba una gran ventaja sobre las demás "lindas y modernosas chicas del barrio" porque según la negrita, eran tan tontas que no sabían cómo charlar con un chico....

Ese fue el comienzo de una postura diferente de negrita en su socialibilización con el entorno. Ya no eran sus amigas de la cuadra y sus familias, ya no eran sólamente los comerciantes del barrio y los clientes de la gomería o del taller de su padre.... Ahora comenzó la conquista de los que vivían en otras partes de ese barrio, que ahora se hacía cada vez más grande.

Veremos cómo le va en esta nueva etapa...

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