Los meses pasaron...
El edificio crecía y mi panza también...
Y llegó el día en que nació el segundo varón: Mariano.
Ese día, y durante dos o tres más ,Pablito se volvió tartamudo...
Es que nunca nos habíamos separado... y aunque creí que le había preparado lo suficiente... resultó que no!
A los pocos días después regresamos y el departamento ya nos iba chico... Pañales , juguetes, chupetes y golosinas, siestas y llantos y noches en vela...
Pero Marianito ...Qué niño más bueno, tan sano y tranquilo!!! Dios ha bendecido la casa y la vida con este nuevo niño!!!
Y Pablo espiaba, se ve que celoso de aquel que cuidaba su madre durante el día y la noche!
Un día me dice, mientras el hermano estaba bebiendo su leche, apenas tenía una semanita de vida el chiquillo, ....
- "Mamata si éste no se sienta, no camina, no tiene ni dientes ni pelo, no juega...
Devolvelo!!!!"....
Ja Ja Ja ! No he dicho que cada salida de Pablo era para hacer carteles?
Y así transcurrían los días y meses...
Todos en paz, creciendo los niños, mamá adelgazando y poniéndose linda!
Y entonces Mariano en el carro, Pablito a su lado y la mami contenta mostrándole a todos orgullosamente sus dos hermosuras!!!
Bonitos y dulces mis dos muchachitos!
Y así nuestra vida, con juegos, paseos, planes de futuro... muy juntos los tres ...
queriéndonos mucho...
Y todos los días, salimos juntitos a la calesita... y también pasamos por la Casa nuestra... y le saludamos y también paramos ahora por el frente porque allí terminan ya dentro de poco nuestra nueva casa... la del segundo al frente....
Y hacemos el picnic y andan en la Cale... y el abuelo ríe con los dos pequeños que ahora el atiende con sumo cuidado...
Pronto ... muy prontito ... seguirá este cuento
....
El edificio crecía y mi panza también...
Y llegó el día en que nació el segundo varón: Mariano.
Ese día, y durante dos o tres más ,Pablito se volvió tartamudo...
Es que nunca nos habíamos separado... y aunque creí que le había preparado lo suficiente... resultó que no!
A los pocos días después regresamos y el departamento ya nos iba chico... Pañales , juguetes, chupetes y golosinas, siestas y llantos y noches en vela...
Pero Marianito ...Qué niño más bueno, tan sano y tranquilo!!! Dios ha bendecido la casa y la vida con este nuevo niño!!!
Y Pablo espiaba, se ve que celoso de aquel que cuidaba su madre durante el día y la noche!
Un día me dice, mientras el hermano estaba bebiendo su leche, apenas tenía una semanita de vida el chiquillo, ....
- "Mamata si éste no se sienta, no camina, no tiene ni dientes ni pelo, no juega...
Devolvelo!!!!"....
Ja Ja Ja ! No he dicho que cada salida de Pablo era para hacer carteles?
Y así transcurrían los días y meses...
Todos en paz, creciendo los niños, mamá adelgazando y poniéndose linda!
Y entonces Mariano en el carro, Pablito a su lado y la mami contenta mostrándole a todos orgullosamente sus dos hermosuras!!!
Bonitos y dulces mis dos muchachitos!
Y así nuestra vida, con juegos, paseos, planes de futuro... muy juntos los tres ...
queriéndonos mucho...
Y todos los días, salimos juntitos a la calesita... y también pasamos por la Casa nuestra... y le saludamos y también paramos ahora por el frente porque allí terminan ya dentro de poco nuestra nueva casa... la del segundo al frente....
Y hacemos el picnic y andan en la Cale... y el abuelo ríe con los dos pequeños que ahora el atiende con sumo cuidado...
Pronto ... muy prontito ... seguirá este cuento
....
No hay comentarios:
Publicar un comentario